Tres décadas al servicio de la formación de excelencia de los residentes
14/02/2025
Doctor Portilla: “La obligación del profesional sanitario es transmitir a las nuevas generaciones el conocimiento científico y también los valores humanos”
Alicante (14-02-25).- El doctor Joaquín Portilla Sogorb, jefe del Servicio de Medicina Interna, finaliza su trayectoria como jefe de Estudios del Hospital General Universitario Doctor Balmis, después de 35 años al frente de este cargo, que ha ejercido con una marcada vocación de servicio y un profundo respeto por la profesión sanitaria.
Accedió en el año 90 a la jefatura de Estudios, figura que centraliza la gestión de la formación sanitaria postgraduada, siendo un joven que acababa de finalizar la residencia en Medicina Interna, con una firme motivación por la enseñanza, y logró dar un nuevo rumbo a la Comisión de Docencia. Llegó con menos de una decena de especialidades acreditadas para la docencia postgrado y deja el puesto con nada menos que 38 especialidades sanitarias, que suponen una gran diversidad de especialidades MIR, EIR, FIR, BIR y QIR.
Su intensa y esmerada labor, apoyada a lo largo de los años por un robusto equipo de tutores y demás miembros de la Comisión de Docencia (de la que ha sido también su presidente por ostentar el cargo de jefe de Estudios), ha logrado posicionar a este centro como un referente en la formación de especialistas.
En este sentido, el Doctor Balmis es el hospital de la provincia que más residentes nuevos recibe cada año (alrededor de 80), con un volumen total en torno a los 350 residentes en formación y 85 tutores en la actualidad, y el que concentra también el mayor número de residentes externos, procedentes de otros hospitales de la provincia, pero también de otras partes del territorio nacional y de otros países, que solicitan realizar periodos formativos en el centro, atraídos por su calidad docente.
Y es que, como reconoce el doctor Portilla, el nivel formativo “ha mejorado de forma sustancial con el paso de los años, entre otras cosas, porque hay un elevado compromiso y una preocupación constante por ello; las propias especialidades, los tutores y la Comisión de Docencia en su conjunto son muy exigentes con la consecución de los objetivos dictados por cada una de las especialidades”, ha subrayado.
Este desarrollo docente ha ido de la mano, como no podía ser de otra manera, “de la evolución natural del hospital, convertido en un centro de primer nivel. La calidad asistencial ha ido in crescendo, la innovación y las nuevas tecnologías se han ido incorporando a la práctica clínica y, además, contamos con un potente Instituto de Investigación Sanitaria (IIS), ISABIAL. Todo ello ha redundado en la formación de los especialistas”.
Ocupar la Jefatura de Estudios durante tanto tiempo ha supuesto “mucho trabajo extra, añadido al clínico, que no he abandonado en ningún momento. He aprendido cada día sobre nuevos aspectos de gestión, he intentado que los residentes tuvieran siempre la mejor formación posible y que se sintieran apoyados en todo momento. Además, esta labor requiere tener una mente flexible para adaptarse a los cambios generacionales. Desde la Comisión de Docencia nos hemos tenido que enfrentar a retos de forma continua. Hemos vivido incluso una huelga de residentes…”.
Insiste en que una de sus máximas al frente de un puesto de esta envergadura ha sido el trabajo en equipo. “Has de pensar mucho algunas decisiones que son difíciles de tomar y compartirlas con otros profesionales para hacerlo en el contexto de la Comisión de Docencia. Sobre todo, la clave es confiar y apoyar a la gente que trabaja contigo, persiguiendo siempre lo mejor para el hospital”.
Ahora que termina esta etapa, reconoce con timidez la satisfacción del trabajo bien hecho por parte de todas las personas que integran la Comisión y remarca que se lleva “experiencias personales que nos han hecho crecer a todos”.
“Siempre he intentado transmitir a los residentes que no solamente hay que ser buenos médicos, farmacéuticos, enfermeros, etc., o investigadores, sino que nuestra obligación como sanitarios, a través de la historia, ha sido también enseñar y transmitir nuestro conocimiento a las nuevas generaciones, que es lo que se consigue con el sistema MIR, FIR, EIR... Y no solo debemos enseñar el conocimiento científico, sino también tenemos que transmitir valores humanos; es esencial la bondad del profesional hacia los pacientes, la empatía. Debemos pensar, en definitiva, que el paciente es el objetivo de todo nuestro trabajo y que debemos buscar lo mejor para él, ya sea un tratamiento curativo, quirúrgico e, incluso, ayudarle a morir”.
Ha sido un privilegio para este hospital haber contado con un jefe de Estudios con su sabiduría y abnegación. Le agradecemos el excelso legado que nos deja y que permanecerá en todos y cada uno de los especialistas que se formen de ahora en adelante en el Hospital Doctor Balmis.