Alicante (13.06.25). Los pacientes ingresados en el Hospital General Universitario Doctor Balmis se han encontrado este viernes con un menú de autor, elaborado por el maestro pastelero Jacob Torreblanca, Premio a la Mejor Pastelería del Mundo, en colaboración con la investigadora gastronómica Irene Flores y el equipo de cocina del hospital.

Un menú especial que une tradición alicantina e innovación culinaria, adaptado al entorno hospitalario, que ha sido impulsado por la empresa contratista de cocina para conmemorar sus tres décadas de dedicación a la alimentación hospitalaria en el Hospital Doctor Balmis.

Para conmemorar esta celebración y como muestra del firme compromiso con el bienestar y la satisfacción de los pacientes, el centro ha contado con la visita del maestro pastelero Jacob Torreblanca, quien ha diseñado esta propuesta gastronómica con identidad alicantina.

El menú incluye de entrantes un ‘Esgarraet de autor’ en forma de coca de verduras asadas con brandada de bacalao y ajos confitados y ‘Sabor a mar’, que combina un crujiente de puerro y gambas con ‘suquet’ alicantino e hinojo fresco. ‘Y montaña’ es el plato principal, un arroz alicantino con costillas a baja temperatura. Como postre, el inconfundible sello Torreblanca: ‘El sol de Levante’, una tartaleta de limón y merengue con mermelada de tomate y albahaca.

Como ha explicado el responsable del Servicio de Cocina, Pablo Ortiz, “se trata de una iniciativa que refuerza la apuesta por una alimentación hospitalaria humanizada y sensible a la cultura local. Con este aniversario, el equipo de cocina ratifica su compromiso de seguir evolucionando junto al hospital y sus pacientes, garantizando un servicio de alimentación hospitalaria de calidad, sostenible y cada vez más personalizado”.

30 años de trabajo en equipo

En este sentido, son ya treinta años de trabajo en equipo, en los que “compartimos espacios los profesionales de cocina de la Conselleria de Sanidad con el personal de la empresa, por un trabajo común, que es adaptarnos siempre a las necesidades del paciente”, ha subrayado.

En este tiempo se ha vivido la evolución de la cocina hospitalaria hacia un servicio más seguro, equilibrado y tecnológico. Así, esta se ha adaptado a las nuevas demandas: desde la digitalización de los menús (que permite a los pacientes elegir su plato entre varias opciones, siempre bajo prescripción dietética y con consideración a alergias, intolerancias y preferencias, mediante un código QR), hasta la integración de criterios de sostenibilidad y alimentación saludable. Actualmente, más del 50 % de las verduras que se sirven son de proximidad y cada vez se utilizan más productos ecológicos.